La Liga de la Tolerancia (Ucrania)

"En el patio de recreo, todas y todos somos iguales"

La Liga de la Tolerancia es una organización benéfica de Ucrania centrada en la educación social de las personas a través del deporte, la participación democrática y el espíritu empresarial, con la misión de crear oportunidades educativas y fomentar la participación en los deportes. Utilizan el deporte para abordar la marginación, la desventaja y la desigualdad.

Hace un año y medio que Rusia invadió Ucrania. En este tiempo el país ha sufrido la destrucción de muchas de sus ciudades, de infraestructuras básicas como escuelas u hospitales, las personas muertas, incluidas niñas y niños, se cuentan por miles y las condiciones de vida son apenas de subsistencia. Sin embargo siempre hay gente que no lucha en el frente sino por hacer que sus semejantes encuentren un aliciente para seguir viviendo y mantener una luz de esperanza. Y el deporte es, muchas veces, el mejor vehículo para lograrlo.

La ‘Liga de la Tolerancia’ es una asociación de voluntarias y voluntarios: formadoras/es, trabajadoras/es sociales, entrenadoras/es, artistas o líderes juveniles activos dentro de sus comunidades, que tienen como objetivo proteger los derechos de niñas, niños y jóvenes en Ucrania. Utilizan el deporte para abordar la marginación, la desventaja y la desigualdad. 

Su trabajo social empezó en 2014, mucho antes de la invasión rusa, con los primeros conflictos en el este del país. Ucrania, el segundo país más grande de Europa, es multiétnico, multilingüe y multicultural. Alberga a casi 130 nacionalidades y el 22% de su población está compuesta por minorías étnicas.  Esto había llevado a que ya en la última década se vivieran disturbios, controversias políticas y una insurgencia armada en la región oriental.

Las iniciativas de la ‘Liga de la Tolerancia’ buscan sensibilizar al público sobre los derechos humanos, la tolerancia hacia la diversidad, la igualdad de género, o la eliminación de todas las formas de violencia y abuso a través de la participación de la juventud en programas y actividades. Estas son básicamente eventos educativos y deportivos, formación de entrenadoras/es, clubes juveniles e intercambios.

Oleksandr Fomichov, entrenador sénior de la Liga de la Tolerancia, fue desarraigado de su Donetsk natal y, tras mudarse a Kiev, comenzó a trabajar con un orfanato local, brindando las habilidades de entrenamiento adquiridas como ex jugador de fútbol mientras trabajaba como abogado para el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Aquí se dio cuenta de que el deporte era una plataforma eficaz para unir a las personas y romper las barreras. “En el patio de recreo, todas y todos somos iguales”. 
Así que, junto con algunos de sus colegas, dieron el paso para registrar formalmente la Liga de la Tolerancia como una organización benéfica y llevar los buenos resultados obtenidos en Kiev a todo el país.   

‘League of Tolerance’, y específicamente su campaña ‘Juega por los derechos humanos’, utiliza el patio de recreo como una plataforma para promover la educación en derechos humanos a través del deporte de manera inclusiva y accesible. Su prioridad es integrar a personas con discapacidad, minorías étnicas, la comunidad LGBTQ I+, personas de barrios desfavorecidos o que sufren conflictos armados. En su programa ‘Juguemos’, las/os entrenadoras/es se reúnen 6 días a la semana para educación social y entrenamientos de fútbol para niñas y niños. “Cuando vemos las sonrisas en sus caras sabemos que hemos hecho nuestro trabajo.”    

La organización se relaciona principalmente con tres grupos de personas, que se han involucrado en el fútbol en diferentes roles. En primer lugar, niñas y niños que asistieron a su escuela de fútbol (gratuita), con el apoyo del club líder y campeón de la Premier League ucraniana FC Shakhtar (Donetsk). En segundo, jóvenes adolescentes que durante cuatro meses estudian teoría y adquieren experiencia práctica en dirección y entrenamiento de fútbol. Y en tercero, jugadoras, árbitros y entrenadores masculinos de la zona gris del conflicto militar en el este de Ucrania.  

En otra de sus facetas, la Liga de la Tolerancia se esfuerza por aumentar la visibilidad femenina en el fútbol, el deporte ucraniano más popular a través de medidas de discriminación positiva: cuando un gol es anotado por una niña, cuenta como dos. Antes de esto, las mujeres jugaban principalmente como porteras o defensas. Ahora, los niños entienden la ventaja de tener niñas como atacantes y les dan muchos más pases. 

También consideran importante involucrar y educar a las entrenadoras, para lo que trabajan con el Cuerpo de Solidaridad Europeo y el Cuerpo de Paz de EE.UU. En la temporada 2019/2020, entre los 10 clubes de fútbol de la Premier League femenina de Ucrania había 40 entrenadores masculinos y 10 femeninos, con solo una entrenadora principal. El objetivo es llegar al menos a un 30% de representación femenina en entornos de fútbol base.

El fútbol es una excelente herramienta para crear cohesión social y un entorno seguro para la autoexpresión. “Intentamos ser lo más inclusivos que podemos. Tenemos un acuerdo con la asociación de fútbol local y creamos nuestra propia Liga de la Tolerancia (el mismo nombre que nuestra ONG). Hay una regla según la cual todas/os en cada equipo deben jugar los mismos minutos. Antes de cada partido, piensan tácticamente y llegan a una decisión común sobre quién jugará en la primera mitad y quién en la segunda. Con esto reducimos los motivos de conflictos y bullying. Las/os niñas/os entienden que si quieren ganar es mejor apoyar a todos los miembros de su equipo, ayudarles a mostrar sus mejores habilidades y tener un mayor impacto para lograr un objetivo conjunto”.